Umbrella

miércoles, 26 de marzo de 2008


No es el tipo de posts que suelo hacer, pero me pareció tan gracioso que lo he puesto para vuestro divertimento.



Umbrella - Rihanna (lip dub in High Definition) obtenido de Vimeo.

Tormenta sinfónica

sábado, 22 de marzo de 2008


Sinfónico es tu arribo creciente
una letanía gigantemente azul
que se construye a sí misma
desde la lluvia más tenue
hasta el aplauso estruendoso
como todas las catástrofes

Y al menos saberte desgracia
te deja ocultarte bajo lo fortuito
reluce tu naturaleza de naturaleza

Aunque alcances todos los zaguanes
ya no es importante conocerte
eres visible en todas tus distancias
tan groseramente fuerte
al impactar sobre los mundos desde
tu absoluta y simple calma

Cuando te veo desvanecer un día
ya no baten las ventanas, y son mi risa
de entender que es una simple vuelta
en tus ánimos de derruir las casas
donde anidan los sueños azul desastre
mientras se guarecen de tus truenos


Los espolones de luz

lunes, 17 de marzo de 2008


Precisando ciertos bosques
cuando anudo mariposas a la tierra
te veo escapar transparente
y aún cuando todas las muertes
se vayan silbando a la calle de atrás
te señalan, cómo no saber
cuando te inauguras los bajos en fiesta
sólo quise arrojarte mucha mucha sonrisa

Ahora, ahí durmiendo
se te traslucen los cuentos
gracias a las naves con espolones de luz
que arremeten y te dan
y cómo no he de verlo desde aquí
si tus orificios escapan a la mañana

Dímelo otra vez
me gusta saber que construyes universos
para encajarte las estrellas en el pecho
me gusta saber que tu perfección
recorre las falacias más sublimes

Huye artista y no dejes tus gubias
ensartadas en la obra, que perece
toda su arcilla, toda su madera siempre inerte
para qué darle el gusto de volver a morir

Sólo sabes dejar colgada la simpleza
de las noches del invierno, arropando al sol
extraño mártir de tus devenires
porque te atreves a trepar en los mares al revés
donde hundido, has de volar, seguro
horadando tu sonrisa
cómo no verlo claramente, si a tu paso
dejas todas las oraciones inconclusas

pimientarelojnoche

sábado, 15 de marzo de 2008


pimientarelojnoche
Batido, batido en una copa
un desorden sensorial
donde eras y no eras cuando

la luz, toda luz

volaba rápida como luz

y fuiste un destello mentiroso

Ahora, volviendo a mis propias manos
las alzo violentamente hacia mi boca
sabe a pimientarelojnoche

Aquí y allá pasado


Ya está bien entrada la mañana
en la antigua, la madre que les alberga
y los viejos empiezan a desempolvar las bragas
saboreando como una culpa ambrosina
esa macilencia propia de los pecados
que duelen con gusto como las muelas
cuando me tomo un vino, tranquilo y sentado
rehuyendo de contarme los secretos a mí mismo
para no volverme contrario a las corrientes
dictadas por los que quemaron nuestros libros

Así, pensando en la que prodiga esos pasados
tan derechos, tan firmes y solemnes,
anacrónico estandarte de sus voces coloridas
me olvido que cruzando una pizca de noche
alcanzo a pensar que te veo, tan cerca
reconstituyéndote trazo a trazo con los ojos
casi materializarte con tanto pensamiento
como adicto al masoquismo que muere al alborear
cuando aquí ya sea madama y desayuno amizclero
y los hombres de estas latitudes coloniales
empiecen a desempolvar sus propias bragas

El Trackpad

jueves, 13 de marzo de 2008


Empezaré por lo más lógico: comentar que son las 6:22 de la mañana y tengo un insomnio de esos que vienen acompañados por sueño junto a, misteriosamente, una inexplicable renuencia a dejar la laptop en la mesa de noche e intentar dormir. Por otro lado, el sólo pensar en escribir un post en prosa me ha dado unas repentinas ganas de fumar, así que iré a traer una cajetilla nueva, que la anterior ya se acabó.

---Kño está al otro lado del cuarto---

De vuelta, "aquí Kño" (como la famosa frase del Hacker Atilano) 23 segundos después de haberme levantado, y 5 segundos después de haberle metido un porrazo al borde de la compu. Afortunadamente, le compré este protector transparente que deja que se vea la manzanita a pesar de tener la máquina forrada, como un caracol digital, en acrílico.


El motivo de este post es alejar la probable percepción que ustedes, pocos pero ávidos lectores bloggeros, tienen del autor de esta bitácora en forma de poemario, por lo que estuve evaluando acerca de las posibles deformaciones que podría haber sufrido yo, el que suscribe, en vuestras mentes. A continuación figuran algunas de ellas, con motivos meramente ilustrativos:

1) El "Pablomilanesófilo"
Dícese de aquella persona que anda ensimismado entre estribillos como "porque la vida no vale nada" y "sus olores llenan ya mi soledad". Suele vestirse a la usanza clásica reaccionaria, y la gente suele confundirlo con un estudiante de sociología de laPUCP a la que se la ha muerto su perro de nombre "Kant".

2) El "Creativo Frustrado"
Se le llama así a aquella persona, que habiendo estudiado Creatividad Publicitaria con ánimos de emular a David Ogilvy, terminó en un cubículo del segundo piso de Cuarzo, nextel en mano y tarjetero en la otra, buscando clientes medianos sin aspiraciones de ventas, para así poder costear la tarifa plana del internet y con ésto hacer una triste catársis vía Blogspot. Suele esta especie vestirse de camisa de corte standard, pantalones de pliegue frontal, correa talla medium con un hueco extra para que no se le caiga la prenda, y lentes de oferta de GMO, pudiendo también ser confundido con encuestador o vendedor de biblias.

3) El "Bohemio del Z"
El peinado estrambótico, los lentes de carey y los pantalones cuzqueños de rayas de colores delatan a este tipo de especímenes. Debatiéndose entre la lucidez y los "trips" consiguen ostentar cierta consistencia creativa. Las figuras literarias empleadas no son más que descripciones fieles de vívidas imágenes que creen haber visto camino a sus usuales abastecimientos de "merca". 

4) El "Emo-viejo"
Este rótulo aplica a cualquier persona que reniega de la calamidad que ha resultado ser su vida, que es mayor de 20 años y que también, presa de un lapsus generacional, cree haber encontrado un grupo de referencia real sólo por llevar ropa vampiresca, peinados del salón de belleza "Green Mile" y cicatrices en las muñecas a manera de indicadores de su rango de sufriente. Su inconsciente emulación de Santa Rosa de Lima pues no es más que un extravío generacional y denota un marcado masoquismo, junto a cierta necesidad de atención.

Inicialmente no pretendía hacer un detalle tan extenso sobre lo que había estado pensando, pero escribir siempre es un deporte. Lo único que pretendía era comentarles una idea que, por la madrugada, había dado vueltas como mariposa nocturna alrededor de un foco. Navegaba por Newegg buscando geekstuff mientras escuchaba primero "A 18' del Sol" de Luis Alberto Spinetta y luego "Como Estão Vocês?" de Titãs, y derrepente vino a mí la duda más extraña que me haya acorralado durante la noche:

¿cómo me había vuelto tan dependiente del trackpad?

Vayamos por partes, como dijo mi amigo Jack el Destripador (Richard del Rosario dixit): Cuando entré, hace poco más de un año, a Apple a comprar mi nueva MacBook Pro, la adquirí junto a un artilugio casi indispensable para cuanto ser humano tengo la (des)dicha de conocer: El mouse. Hice el desembolso extra impulsado por esa misma necesidad que nos arrastra a agarrar compulsivamente cubiertos al llevar un plato de comida a la mesa, el contar con instrumentos (el tenedor sería entonces un dispositivo de interfase plato-bucal).

Dos semanas después, tenía frente a mí un rectángulo de aluminio de 2.5kg y 1" de alto, junto a un mouse que parecía realmente un ratoncito sin cola, provisto de tecnología de punta (parafraseando a Hugo Cabieses "del piricutín inflado"). Tras limpiar mi escritorio, ahí yacían mis juguetes nuevos (junto a otros tantos), cuando le di al botón de encendido para configurar el mouse. Cinco minutos después, ya estaba usando la computadora.


Así pasaron los días, pero una inconsciente búsqueda arrastraba mi mano hacia el trackpad de la computadora y dejaba al pobre ratón libre. Me preocupaba pues, al inicio, la falta de precisión del trackpad para programas de diseño, y tenía un temor profundo a compenetrarme con esa planchita de metal que descansaba bajo el teclado, como un mono al que le acercan un palito con fuego. Y pasó que, viéndome horas atrás en mi escritorio con la mano en el trackpad mientras el ratón yacía, a unos centímetros, eviscerado panza arriba mostrando el compartimiento vacío donde deberían ir las baterías, me sentí extraviado, realmente extraviado.



¿Qué pasó? en mi otra computadora no puedo vivir sin el mouse, incluso tengo un mouse ergonómico, anatómico, tecnológico, programados sus cuatrocientos ochenta botones para que funcionen a mi antojo como si fuera yo el director de una orquesta miniaturizada, pero en esta computadora no puedo prescindir del trackpad, no puedo vivir sin él. Incluso coqueteé con la idea de irme a Japón, donde seguramente deben haber organizaciones dedicadas a extirpar este nuevo flagelo de la sociedad post-moderna: La trackpadicción (o trackpadependencia).

Pero mis ansias de conocer todo fueron más allá, se desvistió aquella duda primigenia que me asaltaba y se convirtió en una más descartiana: "cómo demonios funciona". Recuerdo haber sacado la batería de esta computadora un par de veces, y haber visto que la parte inferior de aquel dispositivo de interfase no es más que una planchita ridícula de metal y un puente con 5 filamentos de cobre. ¿Es brujería entonces? no lo entiendo. El iPod, en su trackwheel, tiene bajo la ruedita impresa que todos sobeteamos con erótico placer, dos capas separadas por un espacio, para que con una mínima presión se cierre el circuito en cada uno de sus radios, pero acabo de caer en cuenta que mientras explico ésto ¡el trackpad sigue aquí, siendo no más que una planchita de metal!

Me propongo investigar acerca de este interesante (para mí) tema. Mientras tanto, este soliloquio les grafica por qué espacios siderales divaga mi mente... pues déjenme decirle que son los lugares habituales por los que anda, los sinsentidos que colorean la vida como un niño de 3 años con crayolas en la mano al ver una pared blanca.

Pero, luego de tantas vueltas al asunto, debo responder frontalmente a la pregunta que yo mismo planteé al inicio el post, y de la cual se desprendió aquella descripción de personajes y tanto relato sobre un trackpad:

¿Quién soy?



Soy un chico (qué condescendiente conmigo mismo, debería regalarme también una caja de chocolates) que escribe recordando tiempos más felices, que gusta de hacer campañas tomando una cerveza decente, y que sufre de insomnio. Que tiene pocos amigos, pero amén a que son pocos, luego no tendré problemas al realizar mi plan de vida.

Son las 7:24 de la mañana y, escuchando a Cerati tocar un cover de "Bajan", me enciendo un cigarro pensando en qué libro debería terminar mañana. Ya salió el sol, pero lo voy a esconder un ratito con permiso de D's y del Shajarit correspondiente, para soñar con computadoras, con amores que regresan, y con dolores que se extravían en el alma que, a diferencia de mis mp3 refundidos en algún cajón lleno de cables de mi cuarto, espero nunca vuelvan a aparecer.



------------------------------

Otras ideas que cruzaron por mi mente durante la redacción de este post:

- La palabra "anda" debería ser postulada como un gerundio honorario.
- Cuántas tipificaciones huyeron de éste post, y la esperanza de no sentir nostalgia ni remordimiento de que se me olviden después.
- ¿Conozco aún gente que abra las oraciones de admiración con signos de admiración?
- Debería escribir más poemas en vez de contar cómo divago.
- Terminaré de consolidar mi biblioteca en el nefasto iTunes algún día, odio que las canciones no tengan Album art.
- ¿Dónde queda la Avenida Alcorta? (como para preguntarle a Cerati).
- He descubierto una nueva lección de vida: No estornudar de cara a un cenicero.

La medida justa


Las aves carecen del placer de verte
sublime acariciando los caminos
y esa flor se abre por la noche, pudorosa
siempre a perfumar sólo tu ausencia

De un instante de tus pasos efímeros
el sendero es refugio, y cuanto haya dado
alguien a la vida para detenerse
en tu cielo o en tus pasos, decorando
las postales con aromas de extravío
es la medida justa del alma
escrita por la vida en tono de alegría

Aunque carezca todo de ese placer,
como las hojas que mueren sobre ti

Hansel


Mi cuerpo es un bolso cansado
que de donde, cuando me pierdo
empiezo a lanzar retazos del alma
para encontrar mi camino de vuelta

E pi ta fio


Cómo se ríe el mundo

REDOBLE
REDOBLE

cuando revisa sus entrañas
y saca muertos con una pinza

Son cosquillas de hielo
como un perro con pulgas

PLAWNNNN!

y la guitarra es un grillo
se ama, se pretende noche

como una onomatopeya
burlándose del día

És tees el beat
que mea pa ga
to dael al ma
es un cua tro
yu na bur la

es la comedia púrpura
que tejen nébulas
con los arpegios

Siempre el ride, la plumilla
ojos que se vuelven
mirando las huídas

La burla es del mundo
plagado de canciones que terminan
que jamás se cansa de las noches

eso lo sabe cada cueva
cada duende que ha encerrado
un ángel en sus manos

Cie gohe si do
pa rael co ro
el pre lu dio
ya seex tin gue

Cuánto dolor se entierra
cuánto dolor se olvida
clávandome el cielo
en los vuelos oníricos

He de ver
cuando se me desprendan
los ojos
y los violines sigan sonando

Aquí empieza el intermezzo.

Irónicamente


Crece la lanza hacia el borde
para, con los filos
comerse la mañana mano por mano

El hambre es un soldado sentado
megalómano, ruido de pena
abrazo amarrado a un extravío
pero no deja de ser diente
diente y filo que crecen silvestres
como un perro arriba de su corona

Ha empezado a morderse las manos
pensando en canciones alegres
derramado encima del abismo

Perfume de yesca, dulce
pierde todos sus colores al vestirse
de puerta abierta, que se escapa
todo el diente de diamante
como un hijo de los nudos, la burla
flor que se deshoja para encontrarse

Volver hoy

lunes, 10 de marzo de 2008

"Termino de ver Ghandhi y voy"
- P.M.C.

Los espero allá
donde no hay pues, nada
y así saber que esos nudos
son más que secretos vacíos

Y sabré cuanto es cierto
con ustedes, que se corren
ojalá siempre hayan de volver así

Ha pasado tanto tiempo
que conocernos las esquinas
es un arte necesario

Luz, tráiganme un poco de cielo
ahora es el momento, hoy
para dejar de esperar
que necesito la cura de mis pasos

Así pasó


Cuando amarraba la poesía en atados gigantes
te amaba así, de reojo, cuando con atención mirabas
todas esas tardes que eran un vuelco hacia el pecho
hacian las manos felices, y vivíamos el momento

No siendo mucho más que yo, te erguías
solo para verte así, diciendo "también sonrío"
y yo me acomodaba en el pasado, tranquilo
importaba lo que llevábamos por dentro escrito

Cantaba la reina y dormías, y yo te veía dormir
siempre era de día en Tokio cuando llegabas por fin
a mi encuentro, tanto sol había pasado por encima
que no teníamos más sonrisas para contarnos otro cuento

Nos llevamos a caminar a través de los parques por Lima
que era un papel donde nos corríamos de las estelas
papel donde el olivo nos miraba de reojo, también él
como si amara la complicidad, dócilmente enmudecido

Volvió a ser casi de noche, casi llegando, y siempre
camino a las palmeras, era picante nuestro verso
echados los dos me miraste, como siempre lo hacías
Mientras atardecía muy al borde, donde se acaba el tiempo

Pero esa vez, entre granados que no se atreven nunca más
a mirarnos a los ojos, hoy sabiéndose parte de todo
fuimos a comprar algo que mitigue tanta tormenta
y aunque nos fuimos como siempre, nada se fue de adentro

Simpleza


Aquí se ve de más cerca el cielo
pasa a mi rincón, vuela en mi cometa
es cómodo el calor de mi regazo
y no te vendo más de lo que flota
en esa libertad del mundo tan nuestro

Llega a darme esa verdad bonita
la simpleza de saber que estás aquí
no tenemos que viajar, basta estar así
para darte un sueño tranquilo
y un brazo que se te acomode en la vida
para dormir, acurrucados en la noche
siempre hay una mejor manera de volver