Ese amor al que amamantas con paciencia
ese amor juega a verse abandonado
pone el cuerpo lívido si lo acaricias
pero se asoma al haberte marchado
Cada vez que sonríes a lo lejos te sonríe
pero al mirarlo se enrosca en su poesía
Ese amor al que paseas moribundo
ese amor muere sólo en apariencia
se da el gusto de enfriarse en tu regazo
se calienta del recuerdo a tu partida
Tú lo extrañas y el te extraña largamente
tú lo besas y él perece de mentira
Me presionas contra el pecho al verlo inerte
lo rodeamos de canciones y promesas
y nos guiña con su muerte alguna excusa
para hacerlo la razón de nuestro día
Sonríe porque sabe que al alejarse
más cerca nos deja, vida mía
Un juego
lunes, 14 de junio de 2010
Escrito por @KNO_Z a las 1:03 p. m.
Tags> poema
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